miércoles, 7 de diciembre de 2011
La Navidad
¿ Qué celebramos en Navidad ?
El mundo cristiano celebra en estas fechas el nacimiento de Jesucristo, como una forma de hacer reverencia a Aquél que vino al mundo a ofrecer su vida para salvar lo que se había perdido.
Sus enseñanzas no son idealismo sentimental, sino plenitud de sabiduría y prudencia.
Este acontecimiento, por lo tanto, no es un hecho sencillo.
Más sin embargo, lo que pasó ahí movió los cielos en sobremanera.
Lo que muchos olvidamos también, es que en su segunda venida Él vendrá con toda su Gloria.
Esto es lo que muchos ignoramos!!!
O sea, pregúntate: ¿a quien le celebraras en esta época? ¿A tu buen Salvador, o al juez del universo?
Su proclamación de llamarse el Hijo de Dios NO es algo que cualquiera lo puede decir.
Esas afirmaciones, si no son ciertas, quien las dice sería entonces un megalómano, y que si lo comparáramos, entonces Hitler sería el mas sensato y humilde de los hombres.
No hay término medio y no se encuentra ningún paralelismo en las demás religiones.
Jesucristo tiene un plan de salvación para nosotros. Depende de nosotros aceptarlo o rechazarlo.
Lo que Él dijo fue muy diferente a lo que otros maestros pudieran haber dicho.
El mundo cristiano celebra en estas fechas el nacimiento de Jesucristo, como una forma de hacer reverencia a Aquél que vino al mundo a ofrecer su vida para salvar lo que se había perdido.
Desafortunadamente, la “tradición” nos ha hecho creer que el repetir estos actos sistemáticamente es una forma de llegar a Dios, y por lo tanto la profundidad del mensaje se hecha a perder entre comercio, regalos, fiestas, bailes, cuetes, imágenes y jolgorio.
Existen desviaciones del centro de la celebración. Muchos hasta creemos que se trata de la celebración del señor gordito de barba blanca, vestido de rojo y que reparte juguetes.
En otras naciones y culturas que guardan el debido respeto al significado del nacimiento de Nuestro Salvador, esa noche es propiamente una “Noche de paz”, que acerca a las familias y las reúne para meditar sobre este gran acontecimiento.
Aunque se desconoce la fecha exacta, o el tiempo en que Jesucristo nació, no es esto lo que importa. De nadie es desconocido que la vida de Nuestro Señor Jesucristo marcó para siempre la historia de este mundo.
Todos entendemos la profundidad y sensatez de su enseñanza moral, que no es cuestionada seriamente ni por los adversarios del cristianismo. Incluso aquellos que rechazan a Dios, aceptan que “están completamente a favor de la enseñanza moral del cristianismo”.
Sus enseñanzas no son idealismo sentimental, sino plenitud de sabiduría y prudencia.
Este acontecimiento, por lo tanto, no es un hecho sencillo.
La “tradición” nos lo ha presentado como un niñito indefenso que nació humildemente en un pesebre, y sobre esto pretende que la gente se sensibilice para volverse hacia Él.
Más sin embargo, lo que pasó ahí movió los cielos en sobremanera.
Lo que muchos olvidamos también, es que en su segunda venida Él vendrá con toda su Gloria.
Cuando el sumo sacerdote le preguntó “si Él era el Cristo, el Hijo de Dios”, Jesús le respondió: “Tú lo has dicho. Y además os digo que desde ahora veréis al Hijo del hombre sentado a la diestra del poder de Dios y viniendo en las nubes del cielo”.
Esto es lo que muchos ignoramos!!!
La gente celebra esta fecha a su manera, muchos se aprovechan para embriagarse y “pasársela bien”. Más sin embargo ignoran que el motivo de su jolgorio es el nacimiento de Aquel que aparecerá al final de la historia como juez del universo.
O sea, pregúntate: ¿a quien le celebraras en esta época? ¿A tu buen Salvador, o al juez del universo?
A pesar de saber esto, todavía muchos estarán pensando si esto es cierto, o que quizás Jesucristo no era la persona que decía que era.
Su proclamación de llamarse el Hijo de Dios NO es algo que cualquiera lo puede decir.
Esas afirmaciones, si no son ciertas, quien las dice sería entonces un megalómano, y que si lo comparáramos, entonces Hitler sería el mas sensato y humilde de los hombres.
No hay término medio y no se encuentra ningún paralelismo en las demás religiones.
La idea de un gran maestro moral que diga lo que Jesucristo decía es totalmente imposible. La única persona que puede decir esa clase de cosas o es Dios o es alguien que no está en sus cabales.
Pero como Él no fue visto nunca como solo un maestro moral, las personas con las que se encontró no decían esto último, sino que produjo en ellos: odio, aberración o adoración.
Jesucristo tiene un plan de salvación para nosotros. Depende de nosotros aceptarlo o rechazarlo.
Lo que Él dijo fue muy diferente a lo que otros maestros pudieran haber dicho.
Otros dicen: “esta es la verdad sobre el mundo. Este es el camino que debéis seguir. No te fijéis en mí si no en mis enseñanzas”.
Pero sólo Jesucristo dice: “Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”. “Venid a mí, no tengáis miedo. Yo he vencido al mundo”.
Cuando celebremos esa noche, meditemos en esto. Y que esa sea una “Noche de Paz, Noche de Amor” para todos.
Paraninfo de la UC
Exposición "Desde el sur del Silencio"
El día 1 de diciembre a las 20 horas, en el Patio del Paraninfo de la UC., tendrá lugar la inauguración de la exposición “Desde el sur del silencio”.
La exposición de instalación escultórica que representa a 28 hombres y mujeres procedentes de diferentes países de África subsahariana, podrá visitarse del 1 al 23 de diciembre en el patio del Paraninfo de la Universidad de Cantabria, en horario de lunes a sábado de 19 a 21 horas.

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